El sábado pasado se puso en órbita el satélite GeoEye-1, y lo más destacado de este lanzamiento es que no estamos hablando de un satélite comercial, sino de un aparato controlado completamente por la Agencia Nacional de Inteligencia Geoespacial del Departamento de Defensa de EE.UU, y que cuenta con el patrocinio de Google, entre otras empresas como Boeing.

Construido por General Dynamics mediante el proyecto NextView, el GeoEye-1 viene equipado con una cámara ITT de última generación, capaz de distinguir objetos de 16 pulgadas en la superficie de la Tierra con color de 11 bits por píxel.
Aunque las imágenes que se obtendrán son propiedad de Google, ellos no podrán acceder a las de mayor resolución, ya que éstas son propiedad del gobierno estadounidense, que es el que financió el proyecto casi enteramente a través de NextView.
Enlace: Gizmodo ES.